Fue un sábado en el que salí de casa pensando, me brota la leche, no hace calor y tampoco es fin de mes. Hoy será el día para el cine del recuerdo.

La verdad es que tomé el colectivo, bajé frente al cine y crucé.

Sorpresa! cuatro personas únicamente, dos sentadas en las butacas, una en el balcón al lado de las escaleras y otra pululando por los pasillos.

Subí y me fui al cuartito en donde un hombre me tiró la goma un rato, nada especial, por lo que corté y me fui para enfilar al baño, cuando me paré al lado del que estaba al borde de las escaleras, pelé y agarró viaje, un culo hermoso, llegaron unas dos personas más al cine por lo que podía ver. le di un rato, pero luego de la gente que pasaba a cada rato se cortó y me fui a dar una vuelta.

Ya daba todo por cerrado y una pérdida de tiempo, pero el universo se apidadó de mi y vi pasar al flaco del domingo anterior con el que hicimos gran fiesta gran .

Cuatro….¿son multituld?

Rápido para arriba lo encontré y empezamos a turnarnos y darnos mutuamente, que rica verga que tiene, la temperatura subió, ya sudando la gota gorda y aprovechando que me dice que necesita tomarse un viagra cortamos y me fui a sentar abajo en las butacas un rato. entre toqueteo y chupadas de algunos de los otros que no despertaron ningún interés en mi, apareció el primer flaco a mi lado, que si bien era pasivo, tenía una buena chota, le hice señas de ir al rincó más oscuro de la sala al fondo y nos fuimos allí. Cambió la onda, agarró confianza y empecé a darle por todas las posiciones habidas y por haber, hasta se sentó en una butaca y se dejó caer para que le pueda dar patitas al hombro, ay que placer! estuvimos una media hora, se sentaron dos al lado nuestro, uno le hacía un oral al otro, y tenían intenciones de unirse, pero mi compañero sexual no quería ni tocarlo y sólo repetía, “si no tenés forro no, ¿tenés forro?” ante respuesta negativa y ya que la pregunta se hacía repetitiva este chico se me puso a cabalgar mirando hacia la pantalla mientras yo sentado en la butaca aproveché a chuparle al activo que estaba al lado un poco, el otro se fue.

Apareció el hombre del sábado pasado, se acercó, vi que intercambiaron palabras, y me dice luego que querían ir a otro lado, yo decidí que no. y este le dijo al otro que “estaba conmigo”, parece que se ofendió y se fue. Mejor aún nuevamente vuelta y vuelta, duro y parejo, aproveché y probé el patitas al hombro que me fascinó. Me comentaba que le faltaba mucho para acabar, pero en un momento veo que se le pone dura como una roca y le entrego para que bombée, me dice “¿querés que te preñe?, pedímela” sin dudar le sigo el juego y no pasaron cinco segundos que siento el latido de su pija adentro… le pido que no pare y me salta toda la leche a mi también.

ya sudado hasta el alma nos despedimos y me fui a descansar… otro día genial, este cine siempre garpa.

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