Este finde tuve la imperiosa necesidad de visitar nuevamente el cine, en realidad no tenía mucha fé y encima fui temprano, aprovechando que tenía que hacer unas diligencias. no eran más de las 10 am (si, ya sé, me van a decir “a quién se le ocurre llegar a esa hora?”, y la verdad, es que al entrar había no más de 3 personas en todo el lugar, y para agregar, no había agua. Me fui directamente para el primer piso, del espléndido día afuera allí adentro no veía absolútamente nada, pero llegué a la esquina más alejada de la entrada y me tropecé con un hombre grande (de edad), al que le pido disculpas y me responde con un “no hay problema” y un “si querés te la chupo”, que sin dificultad frente a tal ofrecimiento acepté. Me lo hizo rico, dos minutos después lo empujo para que se agache contra el banco de parque que está ahí al lado y lo empiezo a bombear, aparece otro flaco, petiso pero interesante, quería coparse para que le chupe el pasivo y a su vez en algún momento me agaché para saborearla yo también. Tenía linda pija, y también bien dura, apareció detrás de mi, y en un santiamén cuando quise acordar estaba dentro mío. Ambos se movían bien y casi sincronizados, el placer fue tal que acabé y me relajé al punto de que sólo restaba irme, literalmente estuve menos de media hora adentro del lugar, pero valió cada centavo y me quedó libre el resto del día.

A tal experiencia al día siguiente me encontré nuevamente en el mismo lugar, luego de almorzar decidí dar una vuelta. Llegué, creía que estaría lleno, más que nada porque era fecha de pago, pero.. no. la presencia no era nula, pero no habría más de cinco o seis personas. Subí como de costumbre y me quedé al lado de la baranda del balcón sobre el proyector, apareció un flaco que debía de conocer ya que me preguntó sobre el tiempo que no pisaba el lugar (pues yo no veía un carajo todavía) y al toque siento que un viejo amigo de esos que no le hacen asco a nada se puso a mi lado (reconocido al tacto, jaja). pero el que me saludó me empujó para que vaya al banco de parque del otro lado, y empezó a chuparme, fue cuestión de tiempo hasta que el otro llego también, para ese momento ya me lo estaba garchando al “gordito” que me conocía (que también logré dilucidar quién era), nuevamente me encontré que me empezaron a apoyar y meter convirtiéndome en el jamoncito del medio, que felicidad!. intercambiamos con mi pareja activa y el de adelante siempre pasivo. (yo un rato en el medio, yo un rato atrás), luego intenté jugar con un hombre mayor, pero no avanzó mucho la cosa, no cargaba tanto y tampoco se le ponía del todo dura. terminamos nuevamente con los originales sandwichito un rato y un rato hasta que nos cansamos y paré un poco.

Justo al hacerme a un lado apareció un gordito con una “Tremenda poronga” gruesa, y se me hizo agua la boca, intenté todos mis artilugios para llegar al “coito” (ah, que vocabulario!), pero parecía que solamente quería que se la chupen. al rato desistió y se fue. Yo bajé y me fui al primer asiento, pero para mi sorpresa el gordito se sentó a mi lado. Cabe decir que no se necesitó mucho para encontrarme en cuatro chupando de nuevo, esta vez el gordito agregó que le gustaban los besos, así que lo complací un poco y luego de un rato en el que se veía mejor por la película más iluminada me habla de que le gustó que yo fuera joven porque la mayoría no lo era, y lo mejor de todo es que me pregunta si quería que me la apoye. ¿se imaginan? tres segundos después estaba ya saltando sentado sobre él. Ese tamaño dolía, un placer doloroso, pero lo disfruté…luego chupé un poco más y descansamos. Fui al baño y luego arriba. Allí estaba mi conocido amigo que se me puso para que le de un poco y acabó al toque. “estaba muy caliente” me dijo. A ésto el gordito se puso en la otra punta junto al banco y el pasivo que conté antes se la empezó a chupar, apareció otro con las mismas intenciones y yo me acerqué a ver qué ocurría. mientras se la chupaban me dice “este tiene buen culo”, le doy una mirada pícara y le pregunto “seguro?”..jaja un minuto después se lo empezó a cojer y el otro pasivo le daba parla “tremenda pija te comés!, duele?, vamos que te gusta!, o no?”. escucho un “tenés que probarla” y un empujoncito para que use ese agujero.. la verdad es que no era tan prometedor, un toque igual y se fue (o se corrió, eso se me hace borroso). El gordito agarra al pasivo que conté al comienzo y se lo empieza a comer, yo al lado mirando con una envidia!. jaja, y encima dice “este sí que lo tiene abierto, y a vos (por mi) te veo una cara de degenerado hijo de puta”…. respondí con un “sólo acá adentro”, una risa y a seguir en la nuestra. Algo debo haber hecho, porque logré meterme en el medio y de repente tenía el vergazo del gordito entrando por atrás mientras le empezaba a dar por atrás al pasivo. A ese momento ya llegué al climax y no aguanté la calentura, largué todo, todo todo, y en cantidad porque hasta mi pantalón quedó mojado cuando la saqué y salpicó. Todos ya diciendo que estaban cansados y necesitaban descansar aproveché para bajar yo también al baño, limpiarme (con pañuelitos porque recordemos que no había agua) y me fui… hecho una lechuga. la verdad fue uno de los mejores findes que tuve en el lugar.

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